jueves, 31 de diciembre de 2009

Del 2009, lo ácido II...

Me niego a vivir en el mundo ordinario como una mujer ordinaria. A establecer relaciones ordinarias. Necesito el éxtasis. Soy una neurótica, en el sentido de que vivo en mi mundo. No me adaptaré de mi mundo. Me adapto a mí misma.
Anäis Nin


Lo que resta del año me parece raro en ciertos aspectos. No recuerdo lo que pasó en verano, y de eso quería hablarles ¿Alguna vez han bloqueado recuerdos? Creo que yo sí, y hoy lo volví a pensar; no recuerdo momentos malos que viví y que ahora pasan a ser explicados con un último suceso trascendental que terminó con todo lo bueno de antes. No recuerdo las cosas malas, y puedo decir que eso ayuda a mi idea de disfrutar la vida sin importar lo malo; la parte difícil de esto, es que cuando salen los recuerdos, suelen salir de golpe y yo me siento mal por ello, porque terminan por llevarse una parte de mi corazoncito.

Por otra parte, mi recuento del siguiente año (de lo que sí recuerdo) no estará disponible aquí para no dañar sensibilidades ni sentimientos ajenos, pero debo decir que si el año antepasado cambio mi idea sobre el karma, éste cambio sobre el eterno retorno. En el post pasado, hice la cita con la que comienza mi libro favorito (hasta ahora) y, hasta éste año me acerqué al eterno retorno de Nietszche.
Si todo se repite exactamente de la misma forma una y otra vez, porque la vida no son ciclos que comienzan y terminan, sino hechos que se repiten tal cual, nuestra última y única salida es vivir de la forma en la que desearías vivir una y otra vez, no puedes hacer nada para cambiar las cosas del pasado, no puedes evitar que llegue el futuro, pero puedes disfrutar la vida como quieres que suceda infinitamente. Si continúas sufriendo la vida, es probable que tu sufrimiento se repita exactamente igual por el resto de tu vida. Dejemos de ser mártires y por primera vez afrontemos que somos nosotros quienes decidimos hacia donde ir. Lo gozoso del eterno retorno, es que si sabes que todo se repite, llega una libertad indescriptible que da pavor. (Mi gurú de cabecera, Pancho, dice que el eterno retorno, en un acto de pesimismo total, también puede tender a empeorar, lo cual, resulta aún peor que la horrorosa idea de que todo se repita)

Al final, todo me lleva a reafirmar que no deseo ser uno más, a vivir de la forma más común, que para mí es la más corriente. Quiero creer que soy capaz de ser totalmente responsable de mis actos y sentir esa libertad de poder disfrutar la vida; dejar los tabús y las inseguridades con las que creces; lo curioso de éste año, es que creo contar lo suficiente para lograrlo. Me siento feliz (hoy) conmigo misma, con mis distintas identidades: Gloup estudiante, Gloup mujer, Gloup ser humano, Gloup animal. He intentado explorar todos estos aspectos por mí misma (aunque sea poquito) y, por suerte, con distintas personas que me han apoyado en todo.

¿Qué sería de mí sin saber el ser sexual que soy? Definitivamente (y no creo que cambie) no me quieren por lo que hacemos juntos con tanta felicidad, pero pienso que esa parte, es trascendental de lo que me hace ser.

De lo que puedo afirmar es que:
1. Fue el año al que he asistido más conciertos, de toda clase de música (bueno, no de toda) en mi vida.
2. Visité cuatro países al otro lado del charco.
3. Rimbaud explains all.
4. Conocí y reconocí a muchas personas valiosas.
5. Tomé clases que cambiarían mi forma de pensar con uno de los mejores profesores que he tenido en mi vida.
6. Las relaciones tipo Sartre-Beauvoir no son lo mío, pero ah! Deseo ser tanto como ella.
7. Quiero ser politóloga, diseñadora industrial, filósofa, pedagoga, curadora, artista plástico (o sea, regresé a mi edad de querer ser bombero y policía).
8. Llené los papeles que pueden cambiar mi vida el próximo año.
9. Un señor se nos acercó en la calle para hablarnos del desliz de Clinton y repetir mucho la palabra “mamada”… de verdad, hay días inolvidables. Tuve mi propio stalker, y al parecer, resulto irresistiblemente atractiva para niños de 17 años.
10. Te amo. Por éste año, por éste mes o por éste día, yo ya encontré mi final feliz.

El soundtrack se conforma de 10 valiosas canciones (lleve su disco de diez pesitos, diez pesos le vale, diez pesos le cuesta):
1. High and dry- Radiohead
2. Loose leaves- Bright Eyes
3. My year in list- Los Campesinos!
4. There is a light that never goes out- The Smiths (LA banda del año, para mí, claro…)
5. Bestia- Hello seahorse!
6. Loco- Andrés Calamaro
7. La Ritournelle- Sebastien Tellier
8. Poker face- Lady Gaga jajajaja (me doy pena, Ana, no puedes juzgarme)
9. Digital Monkey- Balkan Beat Box
10. Protons, Neutrons, Electrons- The Cat Empire
Extras: “Cumbierita intelectual” y “Niiña punk” (horas y horas de diversión)

viernes, 25 de diciembre de 2009

DEL 2009, LO ÁCIDO… O POST DEMASIADO LARGO PARA SER LEÍDO

La idea del eterno retorno es misteriosa y con ella Nietszche dejó perplejos a los demás filósofos: ¡pensar que alguna vez haya de repetirse todo tal como lo hemos vivido ya, y que incluso esa repetición haya de repetirse hasta el infinito! ¿Qué quiere decir con ese mito demencial?

Comenzaba a hacer una lista de que fue lo mejor y lo peor del 2009, ya que al parecer me emociona que termine un año que no considero como el mejor y sin embargo, me dejó unas de las mejores cosas, que hasta ahora, me cambiaron radicalmente, algunas para bien, algunas para mal, y otras para tener pánico en ciertas asuntos, de las cuales me haré responsable y asumo superar.

A pesar de que empecé el año cuidando a una persona especial de su gripe que no lograba recuperarse, puedo decir que las vacaciones 2008-2009 fueron de las mejores, a excepción de la ida a Tepic (nadie debería ir a Tepic); además descubrí que el kayak es lo mío…

El año continuó y descubrí que cuando no se afrontar problemas fuertes, tiendo a huir… sí, a huir. Si lo que hice estuvo bien o no, realmente no lo sé, son cosas que se nos suelen salir de las manos y cuando estás frente a eso, quieres pensar que no es tu culpa y al final terminas bloqueada y hundida en tu propio mundo. Las consecuencias, lo suficientemente dolorosas como para recordarlas y llorar: gritos por teléfono, 4 hojas de verdades en la cara, 1 día completo sin comer, varios sin hacerlo debidamente, distracción de la escuela.

Puedo recordar completamente como fueron esos días: Viernes, hay cosas que sabes sin que te digan. Domingo, el mítico concierto de balkan. Lunes, concierto de Emir Kusturica (el día que descubres que el mundo es chiquito, y que lo único que existe, son las coincidencias). Martes, lloré como nunca en mi vida. Miércoles, no comí. Jueves, seguí llorando. Viernes, me besó. Sábado, decidí darle chance a las coincidencias.

Sobre las coincidencias descubrí 3 cosas: a) la gente que se droga mucho, está mal (punto). b) los hippies son chistosos y saben vivir la vida. c) lo único que tienes en la vida son coincidencias, decir que todo estaba predeterminado a pasar es una tontería, las cosas son, y sabes que las puedes tomar o no. Decir que un poder del más allá decidió que las cosas fueran así, es engañarse a sí mismo… y la no agregada d) cuando no sé que hacer, huyo, simplemente huyo.

Sobre lo de “ese” viernes, descubrí que la mejor persona para consolarte, es alguien que se encuentra en la misma situación que tú. A decir verdad, no sé que fue lo que ocurrió, pero puedo decir, gracias. Creo que nadie se preocupó más por hacerme reír esos días, por consolarme y limpiar mis lágrimas; de repente, caí en pánico por volver a caer en lo mismo, pero decidí intentarlo, claramente con alevosía. Lo intentamos. ¿Podemos decirlo? Yo creo que sí. Cuando lo hablamos fue muy claro: podíamos enamorarnos el uno del otro; podíamos ser felices y podíamos hacernos daño; habíamos distinguido que éramos especiales el uno para el otro, y sin embargo, dentro de nosotros, no deseábamos nada de eso.

Todo ello me dejó varias cosas: el mundo está lleno de personas especiales, contrariamente a lo que pude haber pensado hasta ese momento, y yo, era una persona especial. Hasta ese viernes me sentí tan sustituible y desechable, pero recuerdo los abrazos y empecé a dejar de llorar poco a poco. Recuerdo el “a ver a ver, una sonrisita” y descubrí que eso fue lo que pudo haber ayudado más que otra cosa. Los días siguieron, seguimos saliendo y confirmé lo anterior “el mundo está lleno de personas especiales” Puedo decir, que esos días no hubieran sido lo mismo sin las nuevas personas que apenas descubría y con el cual se conformaría el club de solterones más divertido de la historia.

En una de nuestras tantas reuniones, a alguien se le ocurrió preguntar quién era la persona más importante de su vida. Yo dije ese nombre, bien conocido por todos, y él, evidentemente dijo el nombre de aquélla mujer, reconocida por todos. También recuerdo las palabras de ese día: “espero con todo mi corazón que lo superes algún día” “espero que tú también la superes” Así me di cuenta de lo que me devolvió la felicidad ¡me podía volver a enamorar!, y me regresaba a la depresión ¡pero no quería!...

Con la influenza (bendita influenza! Me regresó la conciencia…, lástima que hayan tenido que morir unos cuantos) llegó el buen pretexto para alejarse de las malas coincidencias y tomar un poquito de conciencia de lo que estaba bien y lo que estaba mal. Por otra parte, habíamos aceptado que la idea de “un clavo, saca otro clavo” era poco honorable, especialmente cuando quieres a alguien. Yo estaba tranquila, sabía que me podía volver a enamorar, sabía que tenía derecho, y sabía que él también. Había hecho un extraño son de paz con él a lo lejos (sin mis amigas stalkers, esto no hubiera podido ser posible, gracias también ustedes): mi ego se encontraba recuperado, mis celos tranquilos, mis miedos sobre el futuro, más relajados.

Continuará después, porque ya me cansé… (Espero, antes de llegar al 2010)

miércoles, 23 de diciembre de 2009

Nada ahora puede importar...

Coincidiendo con el final de semestre (más o menos, eso todavía es estúpidamente relativo en mi caso) uno siempre acaba pensando en cosas en las que no debería de pensar, es decir, rencores añejos, un "ja ja" hacia personajes de nuestro pasado y anexos.
En mi caso he estado pensando en una de las situaciones que Glo planteó hace ya unos meses en cuanto a que las dos pasamos alguna parte de nuestra educación secundaria encerradas en el baño en la hora del descanso. Justo en lo que pensaba eso me llegó un mensaje a mi Facebook de un compañero de la horrenda secundaria en la que estuve. El hombre pasó tres años (bueno, dos, porque en el último no estuvo en mi salón) casi en la banca de al lado, pero hablarle era como una especie de tabú para el grupo de niñas kitty-cat-amo-a-britney-spears-hasta-la-muerte entonces bueno, hablarle al chico en cuestión era una especie de suicidio social que, curiosamente, yo intentaba evitar cuando, de todas formas, el lema "FREAK" ya lo tenía yo tatuado en mi frente.
Total, el chico está ahora en estos lados del charco y quería ver si nos veíamos. Quedamos, todo el show, y pues nada, dentro de todo yo traía un rollo en mi cabeza de qué demonios iba a pasar porque, finalmente, es un tipo que no veía hace cinco años y pico, pero en fin, le di mi celular, me llamó, quedamos para que trajera su hooka a mi estudio y platicáramos de la vida... en general.
¡Sorpresa, sorpresa! El hombre que era más raro que un rancho con timbre, regordete y o-sea-super-super-loser (en palabras de la bola de wannabe-britney que había en mi secundaria) ahora es una especie de rocker-super-alternativo-con-un-chingomadral-de-piercings que me lleva como cabeza y media de altura (claro, no es muy complicado pero él antes no era muy alto) y con una actitud a toda madre.
Nos sentamos a fumar y a platicar... sobre todo de los imbéciles que nos hicieron la vida mierda en la secundaria. No faltó el típico wey super popular de la secundaria que nada más buscaba a la chica más "buena" para presumirla junto con su Lacoste rosa con el cuello hacia arriba que casi se mata en un accidente automovilístico por manejar en estado de ebriedad, bla bla bla. Hasta que este hombre soltó un comentario que ilustró lo que llevaba yo pensando hacía ya bastante tiempo, es decir, "esa bola de pendejos siguen siendo pendejos mientras que tú y yo hacemos lo que en realidad queríamos hacer en la vida y estamos poca madre". A pesar de ser un comentario característico de aquellos que fuimos nerds en la secundaria, la verdad es que no pude evitar darle al wey la razón.
De vez en cuando lo pienso - sobre todo en las experiencias religiosas y catastróficas de mi secundaria y mi prepa - que me encantaría finalmente salir de mi rollo, aún, ermitaño y evasivo de sus múltiples reuniones cursis-para-que-todos-finjamos-que-fue-super-feliz-nuestro-paso-por-la-educación-media-superior-mexicana, no pude evitar pensar lo mismo que este amigo re-encontrado, que la verdad, me daría una alegría idiota que los que me hicieron la vida terrible por el simple hecho de no tener la mente únicamente metida en "el antro de moda" o "en, o sea, es que está super naco ese wey" se ardieran y se retorcieran en limón por que estoy - estamos en el caso de este hombre y yo - llegando a nuestro potencial.
Que, claro, no estoy buenísima como estas viejas seguramente lo están (vamos, años y años y años de ser increíblemente superficial deben de servir para algo ¿no?), o no tengo la menor idea de cuál es la canción que debemos de cantar todos en el antro como si fuera manda, pero al fin y al cabo, tengo cerebro y estoy haciendo algo productivo de mi vida fuera de imaginármela siendo, únicamente, ama de casa frustrada porque fue la chica más guapa de la secundaria-prepa y que jamás se le ocurrió agarrar un libro porque eso era de "losers".
La neta, es raro que yo lo admita, el chiste es que yo soy feliz - y este chico admitió que también es feliz - y eso es lo que cuenta y es lo que vale, cosa que creo que llegará a ser - a lo mucho - un screensaver para todos aquellos que nos jodieron por tres años.

sábado, 5 de diciembre de 2009

Tengo una cita la próxima semana

Si si, es ridículo y estoy verdadera y genuinamente emocionada. Es un chico que conocí la semana pasada en una fiesta/reunión/peda (soirée para estos franceses que sintetizan todo)en donde después, cuando dije "ya me voy" eran las dos de la mañana, hora en la que el metro está - por supuesto - cerradísimo y me dije con insistencia que yo debía absolutamente caminar hasta encontrar un autobús nocturno (para quien no me conozca mucho, soy la persona que más fácil se pierde en este mundo). Por supuesto, me perdí. Pero bueno, esa es otra historia.

El caso es que el chico (que, por cierto, es dos años menor que yo - eso es nuevo - que, como dice mi madre "está de moda") me pidió mi teléfono para que fuéramos juntos a un concierto de jazz manouche (algo así como Thomas Dutronc) asunto que se pospuso la semana pasada porque, claro, dejé TODO para el final como buena mexicana y hasta ahora sigo redactando comentarios de texto, síntesis y exposiciones que estoy a dos minutos de meter la cabeza al microondas (a falta de horno) y cerrar la puerta con fuerza.


El chico es muy muy muy muy muy muy (^n) atractivo, me encantaría decir que ahora si las chicas opinarían lo mismo que yo, pero bueno, el otro día hablaba con Glo de eso, que cuando una chica dice
conocí a un wey guapo todas dicen órale que chido, que envida y cuando Ana dice conocí a un wey guapo todas dicen mm... ¿cómo es? porque mi criterio es sumamente subjetivo. Y bueno, el caso es que estoy emocionada, no lo voy a negar.

En fin, he decidido declarar que tendré una cita la próxima semana (después del día de la bestia que es el lunes cuando SI me voy a volver loca) dado que 1. ya me harté del Word; 2. ya me harté de lavar los platos; 3. ya me harté de comer mermelada sólo para tener un frasco para guardar cosas cuando ODIO la mermelada; 4. si no escribo esto voy a estar dándole vueltas a mi emoción y no me voy a poder concentrar en Rousseau; 5. ¿mencioné que ya me harté del Word?


Y, claro, por que paradójicamente encontré una canción en la radio que ejemplifica a la perfección mi emoción de la próxima semana (además de que la canción está re-mona, ... Glo... ¿la puedes bajar por mí? jijiji) Ahí está para quien quiera ponerse de buenas.


La semaine prochaine - Marc Lavoine

Ah, on ira, tu verras//La semaine prochaine//Sur les bords de la Seine//Dans le Café Verlaine//Je vois la scène//Et puis tu me souriras//La semaine prochaine//Dans ta veste de laine//Si tu as de la peine//Et s'il fait froid//La Madeleine et le Grand Palais//Je te vois courir vers moi//Tu seras mienne//Tu seras la même//Mais une autre, une autre//Une autre à//chaque fois//Quand tu m'verras, tu verras//La semaine prochaine//J'aurai au bout d'une chaine//Une petite croix//Un peu ancienne//Je reviendrai te chercher//La semaine prochaine//Dans l'eau de la fontaine//Où l'on s'est embrassé//A perdre haleine//La Madeleine et le Grand Palais//Je te vois courir vers moi//Tu seras mienne//Tu seras la même//Mais une autre, une autre//Une autre à chaque fois//Ah je l'attends, je l'attends//La semaine prochaine//Comme les autres semaines//J'adore que tu reviennes//Je suis déjà là//Oui je t'entends, je te vois//La semaine prochaine//Chanter cette rengaine//Comme mille sirènes//Dans ta jolie voix//La Madeleine et le Grand Palais//Je te vois courir vers moi//Tu seras mienne//Tu seras la même//Mais une autre, une autre//Une autre à chaque fois//La Madeleine et le Grand Palais//Je te vois courir vers moi//Tu seras mienne//Tu seras la même//Mais une autre, une autre//Une autre à chaque fois.

martes, 1 de diciembre de 2009

Pérdidas sin muerte y sin destrucción (sin predicciones sobre el futuro en el 2012)

Hoy me topé con una curiosa sonrisa que hace mucho tiempo atrás me derritiera. Ustedes saben, esa clase de sonrisa renacentista, ni muy feliz, ni muy triste, sino estando ahí por el placer de estar, ocultando cosas y exhibiendo otras. Mucho tiempo atrás hubiera detenido mi recorrido por disfrutarla más, y en éste preciso recorrido era debido hacerlo porque hace tiempo no se presentaba en el mismo lugar. Había cambiado a ser una sonrisa tonta, como de enamorado. Pero hoy no, hoy no fue como hace años.

Sentí añoranza por los viejos tiempos de amistad, sentí tristeza por la otra sonrisa, mucho más engreída pero igual de fascinante que perdí sin que yo me diera cuenta, o que tal vez nunca estuvo ahí. Sentí frío cuando supe, al ver la sonrisa renacentista, que le había negado su razón de ser a la última que se había acercado; sentí frío y tristeza, tal vez, había dejado ir a aquélla que estaría en el mismo huequito que las otras. Le había negado la amistad de una forma tan vil, sin razón, se había perdido entre sonrisas hipócritas, por miedo. Supe en ese momento, que se sentía ser él.

Escuchas el ruido de la Facultad y de repente todo se calla, te das cuenta que entre un montón de gente habías conocido a una persona con la que eras capaz de comunicarte y ha desaparecido el vínculo existente. Las sonrisas de complicidad se han ido y sólo queda el intentar ignorar al otro, los saludos amables, las sonrisas hipócritas. Sentiste añoranza por lo desconocido.
Extrañarás criticarlo, porque en el fondo sabes que te provocaba empatía, de esa que sientes desde la primera vez y aún así te niegas a aceptarlo. Ahora piensas en la amistad que se acaba de perder ¿Quién dice que no se puede construir una amistad sin hablar una sola vez sobre ti? Es más fácil decir que el adjunto es un idiota, a que tienes pavor por la agujas y las montañas rusas. Terminas cayendo en el hubiera (¿a quién se le ocurrió semejante tiempo?), abres los ojos, bien grandes y te das cuenta que no es un instante, es tu forma de vida, como disfrutas la vida...
Patética Gloria, piensa en como arreglas tu vida y después la de los otros...

http://www.tripulacionnocturna.net/content/view/9/4/ Escuchen al amigo de mi mami jajajaja Rogelio Flores, tal vez el primer hombre que me impulsó a los beat, a allen ginsberg y a bukowski :D