domingo, 19 de julio de 2009

Mi primera vez... en el table!!!

El viernes pintaba a ser un día prometedor con dos buenas personillas para poder hacer algo interesante. Llegando al punto de encuentro descubrí que una no iba a llegar y el otro quería ir por helados a la Condesa, por suerte, mis sabios consejos nos llevaron a unos buenos tacos de cochinita pibil (perdónenme animalitos del mundo) y al table!!!

Llegamos al lugar prometedor sobre la calle de Revillagigedo, con nombre de dios pervertido (también reconocido porque siempre carga con un rayote) a ver a las señoritas. Para comenzar, la variedad la primera "seño" tenía como unos cuarenta, pero como todo, la edad te da experiencia. No my grata de cuerpo, menos grata de la cara, le damos puntos extras porque se quito todo todito (aunque no deseábamos verlo). Era la que bailaba mejor, pudo hacer de esas piruetas en donde sólo te agarras del tubo y abre las piernitas como si nada en el aire, todavía sonriendo.

La segunda variedad nos llegó con una grandota, más joven, aunque eso no signifique que fuera más grata la vista, sin embargo, tiene puntos extras por el tamaño de sus plataformas de 10 cm y tacones de 20cm transparentes, bailar con ellas y no darse un madrazo como el que seguramente alguno de nosotros mortales no pudieramos hacer. (Evidentemente para ir a pedir trabajo a dicho lugar tienes que contar con unos zapatos así.¿Qué sería de un mecánico sin pinzas?)

La tercera variedad, desde mi punto de vista era la que estaba mejor,aunque mi colega decidió que la segunda era mejor. Lo tierno del asunto de la tercera es que mandaba mensajitos antes del acto, y cuando bailaba nada más se veía brillar su bolsita. ¿A quién le habrá mandado mensajitos?¿a la mamá?¿al novio?¿al hijo o a la hija?

Peo la variedad se la llevó un oficinista que llegó. Andábamos viendo una de las variedades cuando una de las meseras le empezó a dar su variedad individual al señor (definitivamente esa mesera contaba con mejores atributos que cualquiera de las señoritas en la pista) y yo andaba de chismosa que me tocó ver todo el numerito en principio, ver como subía la falda de la señorita hasta la cintura, como se entretenía y luego lo pasaba a un silloncito. El colega pudo advertir que el señor recordaba su época de lactancia... Para todo esto, ¿al señor le gustaba que estuviéramos de mirones? pues yo no veia que le molestaba...nada más dejé de ver para que no me salieran lagañas en los ojos.

Característica: Gran variedad de música eso sí. Pasaban de las rancheras, a la música electrónica, al pop en español.

Nota importante: mi colega me hizo saber que los baños de hombres eran amplísimos!! algo como para que cupiera una persona en silla de ruedas, o una con muletas, o dos personas, o tres...


Y recuerden: Pelos! Pelos! Pelos!!!

2 comentarios:

Gab dijo...

Me hiciste recordar a mi nueva novia! jajajajaja

José Antonio Hernández dijo...

Glouu...ya sé que regalarte en tu próximo cumpleaños: un viaje todo pagado a la famosísima Pitaña y pal recuerdo uno de esos zapatos de plataforma transparentes jaja.